Citando a...
Andrzej Sapkowski Añado también que hubo personas que me acusaron y se permitieron lanzarme pullas y todo a causa de que en "La tarde dorada" relleno el texto con numerosas y densas frases hechas de no más y no menos que cinco lenguas extranjeras, incluyendo en ellas las lenguas muertas. Algunos de ellos, con salvaje Schadenfreude , se dieron cuenta de esta cuestión después de la publicación de la famosa y curiosa ley "De la defensa del idioma polaco". Yo, por mi parte, me permito opinar que las personas que no saben lenguas extranjeras son deficientes mentales e imbéciles dignos de lástima y que con leyes debiera perseguirse no a aquellos letreros que contengan palabras como «Café», «Sex shop» o «Irish pub» sino a aquéllos en los que se escriben cosas como «erramientas», «arreglos en el ato» o «serbisios de montage». Puesto que estos segundos, tan comunes, son crímenes, mientras que los primeros son claros e inteligibles para todos, excepto, por supu...